En la primavera de 1913 tuvo lugar en Niza el
estreno de La vida breve del compositor
español Manuel de Falla. A partir del estreno de su ópera en Francia, Falla
adquirió un prestigio internacional como compositor siendo esta partitura su
obra más importante escrita hasta entonces. A pesar de ser una obra fundamental
dentro del catálogo de Falla y de contener algunos números muy conocidos, esta
ópera se representa pocas veces en la actualidad.